EL ZUMBIDO DEL MOSCARDÓN

Alejandro Leyva Aguilar

Entre todas las malas noticias generadas por la pandemia de, COVID-19, es de reconocerse una nota importante que dio a conocer la Secretaría de Hacienda y Crédito Público respecto del quehacer del gobierno de Oaxaca.

Esta institución, colocó al estado de Oaxaca y a su gobierno como el primer lugar en el informe relativo a la presentación del diagnóstico, del presupuesto basado en resultados (PbR) y del Sistema de Evaluación del desempeño (SED) 2020 que califica la transparencia de la entidad.

Hay que recordar que el Gobernador Alejandro Murat Hinojosa es un innovador en la administración pública y ha incorporado las nuevas tecnologías de la información al servicio público para: hacerlo más eficiente y evitar la corrupción.

Oaxaca sobresalió de las demás entidades porque implementó una aplicación para teléfono móvil inteligente llamada “Oaxaca Sostenible” que desarrolló la Secretaría de Bienestar (SEBIEN) al través de la Coordinación de Planeación y Evaluación para el desarrollo de Oaxaca (COPEVAL).

Esta aplicación permite a la ciudadanía conocer los avances en materia de política social en el estado, lo que resulta importante sobre todo en estos momentos de crisis por el COVID-19.

Y tiene razón el Gobernador cuando afirma que solo al través de la transparencia y rendición de cuentas, un gobierno puede ganarse la confianza de la ciudadanía.

Oaxaca ha tenido muy buenos resultados a pesar de tanta catástrofe imponderable, como a sequía y luego las lluvias atípicas de 2017, los terremotos de septiembre de ese mismo año, los incendios forestales y claro, el COVID-19 que de alguna manera le va a pegar a la economía de los estados más pobres del país.

Aún así, el estado en el primer trimestre de 2019 creció a un ritmo del 4% más que muchos estados del país y redujo la pobreza según los indicadores del CONEVAL, lo que quiere decir que vamos por el camino correcto en materia de desarrollo social y por tanto en la administración pública.

Ahora sabemos que la SHCP, califica en primer lugar a Oaxaca precisamente en rendición de cuentas y no es cualquier calificación, se trata del Presupuesto basado en Resultados lo que quiere decir que en Oaxaca, cada peso que se invierte, tiene un destino eficiente y efectivo que, dados todos los indicadores, eleva la calidad de vida de los ciudadanos.

Para darnos una idea de la magnitud de este indicador, pongamos como ejemplo la construcción de la refinería de Dos Bocas en Paraíso Tabasco, sería la séptima en el país pero su viabilidad está sujeta a la caída de los precios del petróleo porque a PEMEX le cuesta 68 millones de dólares al día, extraer y refinar 1.7 millones de barriles y ponerlos en el mercado.

En Oaxaca, cada peso que el gobierno de Alejandro Murat invierte en las comunidades del estado, tiene un resultado tangible, es decir, un resultado que se puede medir por eso las calificaciones que ha tenido a lo largo de sus tres años y meses al frente de una de las entidades más pobres del país.

Y la medición en tan sencilla como la reducción de pobreza en un estado que, después del saqueo indiscriminado del sexenio pasado que dejó deudas por treinta mil millones de pesos, pues es justamente lo que algunos llaman “el milagro Oaxaqueño”.

Viene una prueba de fuego para el gobierno de Alejandro Murat que es la recesión por la pandemia, sin embargo me parece que tanto a nivel social invitando a las comunidades a quedarse en casa y poniendo el ejemplo y a nivel administrativo suspendiendo actividades esenciales en las oficinas públicas, Oaxaca fue uno de los primeros estados en actuar.

No solamente eso, también fue uno de los primeros en dictar medidas de incentivos fiscales a las empresas para que pudieran transitar en estos días de encierro obligado. El liderazgo del Gobernador Oaxaqueño me parece que es manifiesto porque sabe bien que tiempos extraordinarios merecen medidas extraordinarias.

#quedateencasa
@leyvaguilar
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