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Malhadado “Milagro Oaxaqueño”.

Por: José Hernando Martínez-Bastida S.

 

Mil 186 enfermos por Covid 19 en Oaxaca y los encargados de solucionar y prevenir, siguen dando bandazos, buscando cómo cuadrar las acciones con las propuestas del presidente López Obrador, para seguir siendo el estado “favorito”.

Dicen los cánones de la buena crianza, que nunca se debe iniciar con preguntas, pero no hay otra opción, con permiso, de dónde saldrán los 100 millones para reconstruir el siniestrado, accidentalmente, Mercado de Abasto de la capital oaxaqueña.

El Gobierno de México, directamente el presidente, pide que desaparezcan los fideicomisos, entre ellos los de atención a emergencias, del que Oaxaca es cliente frecuente, por lo menos 15 declaratorias de emergencia para el estado en los tres años del gobierno Murat H.

Lo que representa una muy buena cantidad de recursos, en efectivo, especie y crédito, que se auditan en los tiempos que puedan y quieran las autoridades estatales, ese es el principal argumente del presidente de los mexicanos.

El llamado Fondo de desastres Naturales, Fonden, que es administrado y asignado por la secretaría de Gobernación, que encabeza Olga Sánchez Cordero, quien no sabemos haya recibido alguna carta, comunicado, telefonema, correo electrónico, whatsappazo u tuit de Alejandro Murat, pidiendo rectifiquen.

No hay, ni habrá defensa de la principal fuente de dinero “líquido” para el estado, ya que eso representaría ir contra de su ideología de la nueva realidad de la 4ta. Transición de la nación.

Lo que ha genera una gran incertidumbre en la población, es el tema del regreso a la “nueva realidad”, que todo apunta a que si Oaxaca, lo hace, será la cereza del pastel del gran fracaso de la actual administración.

Simple indicador, el gobernador del estado, hace presencia en la zona siniestrada, mercado de abastos, lega garantiza que no están solos y que su administración los ayudara, 100 millones para reconstrucción y se va, los mercaderes piden dialogo y ya no está, protestan y cierran calles.

Esa es la tesitura del trato de cercanía y diálogo permanente, una sola vía, lo que provoca que quienes viven en zozobra de que ocurrencia o decisión importada, sin contacto con la realidad oaxaqueña, se llevará a cabo.

Lo que lleva a preguntar, al encargado de la secretaría de Finanzas, Vicente Mendoza Téllez Girón, cual ha sido el costo de la suplantación, lo que debió haber especificado en la denuncia que presentó, pero no hay contacto con la “vieja” realidad de los oaxaqueños, para saber.

En esta administración, no hubo simplificación de procesos en dependencias, hubo acumulación de poder en los secretarios, poder con base en las funciones, pero no hubo restructura operativa y eso causa solamente caos, que bien aprovechado es desvío.

En los últimos días , vemos al Paco Villareal, líder de una nueva franquicia política en el estado, con gran denuedo explicar a los burócratas maestros de la sección XXII, que sus pagos salen en tiempo y forma, para que estén tranquilos es su aislamiento preventivo.

La supuesta transparencia administrativa y en la rendición de las cuentas, que ha posicionado a Oaxaca en los primeros puestos de la administración pública nacional, simplemente no se ve reflejada en la calidad de la prestación del servicio y en la calidad de vida de los gobernados.

Ni puentes, ni carreteras, ni educación, ni salud, no se pudo que la generación «becada» rescatara al estado del atrzo y recuperaran las riquezas despojadas por los anteriores funcionarios, ha caray, son familia.

Lo que sin duda, de por medio, lleva a la conclusión de que el oaxaqueño, bien nacido, tendrá que seguir haciendo lo que sabe, trabajar, convivir y compartir con los demás su buena sangre, ya que los bárbaros del norte, volvieron a fallar.

Pero algo que destaca al nativo del estado, sabe hacer y poder levantarse, con una sonrisa amable, sigue el camino y sabrá recuperar lo que algunos llamaron “Milagro oaxaqueño” y para la gran mayoría es su diario vivir.

ANDAMOS …

 

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