Sólo trasparencia política.
Por: José Hernando Martínez-Bastida S.
Rectificar es de sabios, pero aceptarlo es honor, ahora resulta que todo estaba planeado y la responsabilidad de que no se hayan abierto a la “nueva realidad”, los “municipios de la esperanza”, SIC.
Pues de la gente que no acata y cumple los decretos, la responsabilidad de que, de abril a mayo, los casos con diagnostico positivo a Covid 19/SARS-CoV-2 en Oaxaca se hayan escalado más de 10 veces, ya hay 606.
Clara muestra de la falta de aplicación de medidas de contención, pero cómo la operación sanitaria depende del “respeto a los usos y costumbres”, en una sociedad con un significativo atraso en el desarrollo social y un grave déficit alimentario, que otra cosa puede hacer.
Marketing político, aplicado a solucionar la miseria de la sociedad, obligada, a vivir con ingresos que no cubren sus necesidades básicas.
El Instituto Nacional de Geografía y Estadísticas, INEGI, señala que, en Oaxaca, el 85 por ciento de los más de 4 millones de habitantes son pobres, aparte lo multimodal, pobres a secas, no comen bien, no viven bien, no tienen acceso a educación de calidad, sin salud de calidad y menos empleos de calidad.
Y ahora, con la inversión que hará el gobernante en Oaxaca de 3 mil 500 millones en el área de la construcción, que dicen los antiguos cánones de la administración pública, que es el motor de la economía social, pero es una nueva realidad y más de lo mismo.
Estos programas son de “cuates”, ya pago una factura el ex titular de la secretaría de las infraestructuras, Fabián Sebastián Herrera Villagómez, ahora con Javier Lazcano y los políticos constructores empresarios, que son los que reparten el pastel.
Quien controlará los nuevos hoteles de playa, las regias casas en la sierra, los recién descubiertos fraccionamientos con spa incluido, todos los negocios o las inversiones que surgen del arduo y “fecundo” trabajo del burócrata de primer nivel, SIC, en beneficio de la sociedad.
Solo bastaría dar una vuelta por Ixtlán, o por el mismo Puerto escondido o las cercanías del Valle de Etla, es un gran botín que reactivará sin duda las complicidades adormiladas por el Covid 19, esas que tumbaron a un director, que sabía, para hacer negocio político de la pandemia.
Señalan grillas internas, que por buscar mejores aires el encargado de la contraloría del estado, Ángel Díaz Navarro, dejará su lugar, lo que será para el ejecutivo del estado, una obvia maniobra, con un alto costo, con él que asigna los recursos del estado.
Porque para lograr el multicitado “Milagro oaxaqueño”, usando lenguaje futbolero, ya se quemaron medio tiempo del partido, y no se ha visto que tenga los hilos de la vida política, menos sociales, pero aún y si aplica lo que sabe y no lo que le dicen, el bisoño Murat H., podrá, sin ¿?.
Oaxaca, el “supuesto” laboratorio social, de ¿qué?, pero bueno, necesita no una reinvención, Oaxaca es firme y solida creación de los miles de personas, hombres y mujeres, que día a día y por años, han salido adelante, a pesar de los, supuestos, políticos que les endilgan.
Lo importante es la reinvención y la verdad, aquí sí, la pandemia del Covid, “Cómo anillo al dedo”, no con enroques de sus amigos de “infancia”, o serán bureacuctatie, de cubierta en francés o la beberiana definición de burócrata.
Un simple cambio en la administración pública, hacer que todos los procesos de la misma sean transparentes, de cara a la sociedad, que tipo de negocio, caló burócrata, pueden hacer en el estado con el mayor rezago en desarrollo social del país.
Eso sería un legado y no lo que sea que está haciendo.
Andamos…