SALOMÓN DA EL BANDERAZO ELECTORAL
Por: Mario CASTELLANOS ALCÁZAR
Por supuesto, que el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz (MORENA) dio el banderazo prematuro a las “corcholatas” que aspiran a los cargos de elección popular, como son senadores, diputados locales, federales y 135 autoridades municipales- que se rigen por partidos políticos, despertando la gallera y la caballada flaca- porque no hay contendientes que tengan piernas de jinete en esta entidad.
Con toda seguridad- que la elección en Oaxaca tendrá sus turbulencias en los 25 distritos electorales locales y 10 federales en el caso de la elección de diputados, además de los 570 municipios, de estos, 135 se rigen por partidos políticos y 435 de usos y costumbres, por lo que ya existe una gran efervescencia política electoral.
Oaxaca tiene 4 millones 132 mil 148 habitantes- que son- el 3.3 por ciento del total de la población a nivel nacional. La lista nominal de esta entidad- hasta el 28 de julio del 2023, es de 3.07 millones de electores, de estos, 1.64 millones son mujeres, lo que significa el 53.3 por ciento del electorado- y 1.43 millones son hombres- equivalente al 46.7 por ciento. La lista nominal de Oaxaca representa el 3.2 por ciento de la lista nominal nacional.
Lo cierto es que el gobierno estatal ya abrió fuego al proceso electoral, provocando el alboroto del avispero, luego de la renuncia de dos secretarios del gabinete estatal, el de Administración, Antonino Morales Toledo y de BIENESTAR, Laura Estrada Mauro, prospectos a la senaduría o diputación federal- deliberados por dedo del mandatario oaxaqueño, aunque- oficialmente- se maneja discretamente, pero sí, son apadrinados por el gobierno estatal de la Cuarta Transformación, la 4T, algo semejante como lo hace el gobierno federal.
Aunque- el gobierno de Salomón- no es la única palabra definitoria en el caso de los puestos de elección popular- porque, se espera la intervención directa del presidente, Andrés Manuel López Obrador, quien está deliberando la reelección de la actual senadora morenista, Susana Harp Helú, quien fue sacrificada en la gubernatura de Oaxaca, que finalmente, la candidatura fue para Salomón Jara Cruz, actual gobernador.
Tampoco, Salomón, podrá quitarse- al director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI- Adelfo Regino Montes, quien está- en la gracia del jefe del Palacio Nacional, como prospecto a la senaduría por Oaxaca, así- como los que pudiera entrometer- la virtual candidata a la presidencia de México, nada más- que no sea- Mariana Benítez Tiburcio, quien renunció recientemente al PRI, por lo que está entre las rechiflas de los priistas y morenistas. Entre la espada y la pared. Su designación sería contraproducente.
Otro engendro de la política de la 4T, que quiere la senaduría por Oaxaca- es el diputado federal del Partido del Trabajo (PT), Benjamín Robles Montoya- quien será tomado como comparsa y títere de MORENA, porque, el PT- es aliado al gobierno de la 4T, sin ninguna posibilidad, pero negociará la reelección de la diputación- como pago a su servilismo, aunque- en Oaxaca- es rechazado y repudiado. Nada quieren saber de este michoacano avecindado en Oaxaca.
Lo que sí, en Oaxaca- ya está prendida la mecha electoral- que será, una lucha sin cuartel entre las tribus de MORENA, que esperan una oportunidad para estallar su ira a costa de lo que fuera- por la disputa del poder, proceso del que no saldrá libre el gobierno estatal en turno- porque también, está habilidoso para manipular el proceso electoral en Oaxaca, que, si no, pero sí, habrá una revuelta en esta entidad.
