IGUALDAD SUSTANTIVA EN EL HOGAR: SMO

Comunicado

  • Masculinidad hegemónica está alejada de los cuidados
  • Cultura patriarcal, minimiza trabajo de cuidados en el hogar
  • Trabajo femenino de cuidados equivale al 24.5% del PIB.
  • Especialista en el tema presenta metodología para creación de políticas públicas integrales hacia la igualdad y la paz social

En México se necesita crear políticas públicas, que no desvirtúen «el trabajo de cuidados», ya que la cultura patriarca responsabiliza, principalmente a las mujeres del trabajo de cuidados, físicos o emocionales de la familia y su entorno, lo cual es una severa carga de estrés y desgaste físico, emocional y mental.

-Entendiendo que el trabajo de cuidados es: el que se realiza al interior de los hogares con el fin de otorgar alimentos, propiciar el descanso y la salud, garantizar la educación y crear las condiciones para el desarrollo con bienestar de las personas.-

En su presentación, Marta Clara Ferreyra Beltrán, Directora General de la Política Nacional de Igualdad y Derechos de las Mujeres, del Instituto Nacional de las Mujeres, INM, explicó «La cultura patriarcal minusvalúa este aporte importantísimo, al no remunerarlo ni reconocerlo en todo su valor. Sean o no madres, para las mujeres esta distribución sexual del trabajo implica una triple jornada y una pobreza de tiempo.

reconocer, reducir y redistribuir el trabajo de cuidados

El feminismo busca generar un sistema nacional de cuidados y hacer una reelaboración de las relaciones de pareja y familia hacia la corresponsabilidad».

La Secretaria de las Mujeres en Oaxaca, Ana Vásquez, señaló: «Que nadie puede sobrevivir sin recibir cuidados, pero «el orden social patriarcal responsabiliza a las mujeres del trabajo de cuidados físicos y, emocionales de la familia y de su entorno,

«Lo que es una severa carga y desgaste físico, emocional y mental para ellas», definió.

Ferreyra Beltrán, explicó la metodología de las Tres R del cuidado: Redistribuir, Reducir y Reconocer, pilares de las políticas sociales que buscan transformar el modelo de cuidados y que exige a quienes elaboran dichas políticas, pensar en un modelo integral.

Un modelo social, con visión en la inclusión económica y financiera de las mujeres, con la creación de nuevos emprendimientos, que sean sostenibles en lo económico, en lo social y en el aspecto del entorno social.

Vásquez Colmenares, aclaró que es un trabajo, generalmente no remunerado, a pesar de que su valor comercial equivale al 24.5% del Producto Interno bruto el país, PIB,

Es una actividad dónde: «la vida humana depende de los atenciones de unas personas a otras», que se debe regular, acotó.

la Directora General de la Política Nacional de Igualdad y Derechos de las Mujeres, mencionó que «es necesario el cambio cultural que plantea la metodología de las Tres R, por que la masculinidad hegemónica está alejada de los cuidados y por ende de la construcción de la paz».

“a mayor igualdad en los hogares, menos violencia, más seguridad para niñas y niños, restauración del seguro social, construcción de paz y sustentabilidad ambiental””, finalizó,

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