Riesgo y exclusión en tiempos de pandemia.
Por: Gramscort´s
México atraviesa actualmente por una crisis sanitaria sin precedentes dada la magnitud en ascenso cada vez mayor de la escala de contagios por el virus denominado COVID 19, el gobierno ha tomado decisiones duras y difíciles para contener la expansión de la pandemia: Por ejemplo las actividades educativas en todo el país fueron suspendidas desde el 23 de marzo de 2020 y muchos niños de educación básica dejaron de asistir a sus planteles escolares, los estudiantes no fueron abandonados, miles de docentes implementaron tareas y nuevos métodos de estudio vía remota con sus propios recursos para atender a los educandos, en otros lugares quizá no fue posible, los rezagos y el acceso a la tecnología impidieron su diseño e implementación oportuna.
Por otra parte, las decisiones para la atención, control, seguimiento y evaluación de la pandemia han sido dejadas acertadamente por el presidente en manos del sector salud, a diario en las últimas semanas el subsecretario y experto en epidemiologia Hugo López Gatell muestra y explica el avance y acciones ejecutadas para atender la pandemia, además de las tareas pendientes por realizar en el orden de lo público; sin duda, la información podría ser confusa para sectores de la población poco avezados en el tema o que desconocen los métodos de atención y medición en cuestiones de salud pública; más aún cuando los medios tradicionales acostumbrados al sensacionalismo y a vender la nota pretender magnificar errores o deficiencias sin prestar atención a lo relevante de las acciones, recursos, tiempos y formas en que se está atendiendo en éstos momentos la ahora denominada “emergencia sanitaria” que se encuentra en la fase 2
La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador heredó dentro de la administración pública muchos subsistemas con enormes rezagos, el campo, la educación, comunicaciones y principalmente y ahora más visible el de salud, se privilegió en el pasado un modelo excluyente y privatizador que paulatinamente dejó a muchos de esos subsistemas al borde del colapso en infraestructura y recursos de toda índole; asimismo, regionalmente en los Estados y municipios del país se replicaron medidas similares que no abonaron a mejorar dichos subsistemas. El gobierno hace lo propio con los recursos legales, económicos y humanos con los que cuenta, incluso ya está en funcionamiento el Plan DN III en que los militares participan en cuestiones de seguridad y salud, podremos cuestionar las medidas pero recordemos que atravesamos la tormenta que amenaza expandirse aún más y en éste contexto habrá quienes pretendan llevar agua a su molino y beneficiarse en lo económico y en lo político de la situación actual. Sin duda, se avecinan tiempos difíciles, pero el mundo ha sabido con la solidaridad y entrega de la población salir avante incluso de las mismas e inhumanas guerras del pasado.
No será menor la crisis económica que se avecina y que al día de hoy es aún inestimable, pequeños y medianos empresarios hoy perciben con mayor incertidumbre su propia subsistencia y futuro inmediato, pero habrá que ser creativo y resurgir como el ave fénix, ningún mexicano la está pasando mejor en cuarentena. Hoy es más importante la vida y debemos mirar nuestra permanencia como una oportunidad de ser y hacer mejores cosas en beneficio de nuestra sociedad y del planeta.
En tanto que el gobierno federal hace lo propio, a ras de piso el sistema de salud se enfrenta día a día con horror a sus propias limitaciones, falta de insumos, infraestructura y equipamiento además de la carencia de profesionales de la salud para la atención de la creciente pandemia, los recursos parecieran no llegar debido a que la demanda se incrementó en el mundo y la oferta es insuficiente para solventar todos lo requerimientos; aquí cabe señalar que ni los países de primer mundo estaban preparados para atender la emergencia, mucho menos países como el nuestro cuyo crecimiento y desarrollo ha sido limitado debido a las políticas económicas implementadas en las últimas décadas.
El tema de salud pública es relevante en cada una de sus aristas y quienes trabajan en el sistema de atención directa a pacientes con COVID 19 deberían laborar en mejores condiciones para protegerse de posibles infecciones, allí hay un área de oportunidad que debe atenderse con la mayor premura para suministrar el vestuario y equipo en el menor tiempo posible a fin de aminorar los riesgos de contagio de quienes están en la primera línea de atención a pacientes hospitalizados.
Por otra parte, como sociedad tenemos un reto mayor, ser empáticos con los trabajadores de la salud, ya que recientemente el diario de circulación nacional El Universal[1]ha venido documentando[2] una serie de agresiones que han sufrido quienes trabajan en los sistemas de salud de nuestro país, entre otras se les ha pedido que bajen del sistema de transporte público, se les ha arrojado cloro e incluso no se les ha permitido ingresar a sus hogares y se les ha insultado y vejado en la vía pública por considerarlos sin prueba alguna como portadores y posibles fuentes de contagio. El miedo puede ser más nocivo que la propia pandemia, pero la ignorancia es fatal, conlleva exclusión y una animadversión y posible repugnancia innecesarios hacia quienes hoy están cumpliendo la misión que se impusieron como forma de vida y de trabajo, “ayudar a salvar vidas”. No caigamos en el juego excluyente, discriminatorio y violento hacia quienes hoy no están en casa por ayudar a aminorar la catástrofe sanitaria que padecemos.
Afortunadamente sí hay otras muy buenas iniciativas como aquellas que brindan servicio gratuito de alimentos a los médicos y enfermeras, incluso taxistas han ofrecido llevarlos sin ningún costo a sus centros de trabajo y servicio de café entre otras que van surgiendo en distintas redes solidarias. Si bien hay temor e incertidumbre en la población, no será repudiando ni ultrajando la dignidad de los trabajadores de la salud como resolveremos éste gran problema. Seamos capaces de vislumbrar un mejor mañana en que podamos ayudar a reconstruir todos los sistemas de nuestro país y educar en valores a nuestra sociedad, ahí el llamado y ahí también nuevos retos y posibilidades infinitas de cambio.
- https://www.eluniversal.com.mx/nacion/sociedad/se-duplican-denuncias-por-discriminacion-personal-medico-por-covid-19 ↑
- https://www.eluniversal.com.mx/estados/por-miedo-coronavirus-agreden-enfermeras-en-guadalajara ↑