EL ZUMBIDO DEL MOSCARDÓN

MEDIO AMBIENTE EN LA 4T

Por: Alejandro Leyva Aguilar

Politicemos un poco el “Laudato Sí”, la Carta Encíclica 180 del Papa Francisco sobre nuestra casa común; es relevante hacerlo puesto que los discursos de la cuatroté y en específico del peje, son más hipócritas de lo que parecen.

Dice el viejo de palacio Nacional que “por el bien de todos, primero los pobres”, una frase que por cierto, no es suya, -como la tesis de Yasmín Esquivel- sino del priísta Enrique González Pedrero, ex gobernador de Tabasco y mentor del Macuspano.

Dice Francisco “El cambio climático es un problema global con graves dimensiones ambientales, sociales, económicas, distributivas y políticas y, plantea uno de los principales desafíos actuales para la humanidad. Los peores impactos, probablemente recaerán en las próximas décadas sobre los países en desarrollo”.

Y sigue “Muchos pobres viven en lugares particularmente afectados por fenómenos relacionados con el calentamiento y sus medios de subsistencia, dependen fuertemente de las reservas naturales y de los servicios ecosistémicos, como la agricultura, la pesca y los recursos forestales. No tienen otras actividades financieras y otros recursos que les permitan adaptarse a los impactos climáticos o hacer frente a situaciones catastróficas y poseen poco acceso a servicios sociales y protección”.

Francisco continúa “Los cambios del clima originan migraciones animales y vegetales que no siempre pueden adaptarse, y esto a su vez afecta los recursos productivos de los más pobres, quienes también se ven obligados a migrar con gran incertidumbre por el futuro de sus vidas de sus hijos. Es trágico el aumento de los migrantes huyendo de la miseria empeorada por la degradación ambiental que no son reconocidos como refugiados en las convenciones internacionales y llevan el peso de sus vidas abandonadas sin protección normativa alguna”.

Termino la cita “Muchos de aquellos que tienen más recursos y poder económico o político, parecen concentrarse sobre todo en enmascarar los problemas o en ocultar los síntomas, tratando solo de reducir algunos impactos negativos del cambio climático…”

El Papa tiene razón. Los poderosos en nombre de la generación del dinero, no les importa contribuir con el cambio climático y ya por la economía de mercado o por capricho en el caso mexicano, suman acciones al ya imparable cambio climático que, como bien lo dice el máximo líder católico, impactará primero y por desgracia a los más pobres.

El peje no se da cuenta que, si tumba un solo árbol en la selva maya, contribuye al deshielo en Groenlandia y, por su capricho de construir un tren que pase por “la chingada”, su rancho en Palenque y pueda vender a precio de oro un pedazo de esa tierra, no le importa talar el corazón de una selva que es uno de los pocos pulmones que le quedan no solo a México sino al planeta.

Por cierto, en sus discursos de campaña dijo tajante “NO VOY A TALAR UN SOLO ÁRBOL”.

¿Cuántos millones de metros cúbicos de madera se han talado en Yucatán?, esa es una cuenta que peje deberá pagar en la posteridad porque el daño que le está haciendo al mundo y en especial a los mexicanos pobres, es mayúsculo. Ahí la presidente de la SCJN Norma Piña, va a tener que actuar, porque es un hecho de justicia.

Su discurso de “primero los pobres”, ya se le ha embarrado varias veces en la cara. En su propio estado natal Tabasco, tuvo que inundar Nacajuca la zona de los pobres, para evitar inundar Villahermosa, la zona de los ricos. En Oaxaca el huracán Ágatha, golpeó con toda su fuerza la costa y los afectados, muchos con la vida, fueron los más pobres.

Por cierto, a la fecha, los damnificados que perdieron todo, no han recibido los apoyos por parte de las administraciones morenistas como la de Pluma Hidalgo que huyeron con los recursos, amparados por el cambio de estafeta en la municipalidad.

López piensa anacrónicamente que la autonomía energética, México la obtendrá refinando petróleo, una actividad que emite toneladas de anhídrido carbónico -gas con potente efecto invernadero a la atmósfera- y además construyendo una refinería -que aún no refina nada a pesar de haber sido inaugurada- en una zona de manglares, deforestando la barrera natural contra huracanes y afectando el ecosistema marino.

Y no se diga del programa “sembrando vida”, que de facto es un fracaso porque no existe un estudio efectivo de lo que deben plantar los campesinos y en algunos casos como en Tabasco, deforestan sus parcelas para sembrar cacao que abastece la fábrica de chocolates “rocío”, propiedad de los vástagos del “presidente”, así en minúsculas y entre comillas.

Francisco describe bien al peje, no lo dice con estas palabras, pero las da a entender. López es un pendejo con iniciativa y no hay peor peligro para una sociedad que alguien que cree que lo sabe todo.

@leyvaguilar
Instagram: leyvaguilar
Facebook: Francisco Alejandro Leyva Aguilar

Entradas relacionadas