PERLA WOOLRICH- SOLITARIA
Por: Mario CASTELLANOS ALCÁZAR
Apenas, hace unos días, la virtual candidata a la presidencia de México, Xóchitl Gálvez Ruiz, por el Frente Amplio por México, pidió al Partido Acción Nacional (PAN)- que la arrope- y que, haga algo- porque la está dejando sola, en Oaxaca, la presidenta del Comité Estatal del PAN, Perla Woolrich Fernández, esta más solitaria, que la abanderada presidencial.
El PAN, en Oaxaca, está inerte y sin acción, así, como- Perla- no tiene programación, ni equipo de trabajo partidista inteligente- que favorezca a Xóchitl- en su precampaña electoral por la entidad oaxaqueña, ante el desmembramiento del blanquiazul, que está, en la bancarrota, producto del caciquismo político del panismo, balcanizado por los grupos, que han ostentado al PAN como patrimonio familiar.
Xóchitl- es la actual responsable de la construcción de Frente Amplio por México, integrado por el PRI, PAN y PRD- y en su momento, será la candidata presidencial, con la representación del PAN- registrada en sus acciones políticas con las siglas de este partido, aunque, no es militante nativa del albiazul.
Lo cierto es que el PAN- está, como si nada, con desgano e indiferente, sin acción alguna, de respaldo a su virtual candidata presidencial. Los Comités de este partido, tanto el nacional como los estatales están con serios problemas de integración, muy divididos- que no presentan opción alguna para sacar adelante a Xóchitl, quien se las está arreglando sola- y por cierto- tiene carisma y el apoyo de los sectores sociales y políticos.
En Oaxaca, el PAN, el partido de derecha, no tiene arraigo, ni estabilidad política, pues su dirigente estatal, Perla Woolrich Fernández, ya no tiene oxígeno, “ni piernas de jinete”, por lo que le es difícil, la congregación de las huestes panistas, desbalagadas, por la falta de liderazgos.
Lo saludable sería la reestructuración del Comité Estatal del PAN- sus comités municipales y seccionales. El cambio, o la sustitución, de Perla, quien no puede más. La vida ya le dio jauja: diputada local, federal, cargos partidistas en lo político y administrativo, pero ya no tiene la interlocución, por ahora, ha perdido la interacción, ya no ve más allá del partido- y todavía, busca el beneficio de una próxima diputación plurinominal-
En Oaxaca, el PAN, no solo requiere del trabajo cotidiano, como la reestructuración de los cuadros políticos partidistas, en primer lugar, se necesita un servicio de comunicación social, que brinde oportunamente la información con nuevas expectativas de integración profesional, que abra pautas de mejores relaciones con los cuadros informativos, en la militancia y los sectores sociales, con señales de un partido en reconstrucción- que despierte el interés de la militancia, cuestión que no tiene la lideresa del PAN.
Más, que cuadros territoriales, Woolrich, necesita un equipo de trabajo- así, como reconcentrar a las fuerzas vivas del otrora partido albiazul, en manos del caciquismo pernicioso de la exlíder, Natividad Díaz Jiménez, quien hizo del PAN un patrimonio Familiar.
Se requieren nuevos enfoques, proyectos, estrategias, procedimientos y un plan de promoción a Xóchitl, con un programa de logística- y mercadotecnia, sutileza e ingenio, así, como un trabajo de inteligencia, que Perla no la tiene, que, si puede, pero le hace falta la frondosidad de la vida, el oxígeno- y nueva corriente sanguínea e ideológica de la militancia y los portavoces de la política.
El PAN está solo, muy solo, en Oaxaca, pese, a que es el partido, que debe tomar las iniciativas, porque es la bandera de Xóchitl- el PRI y el PRD son socios, aunque la responsabilidad, la tienen, pero la cabeza es el blanquiazul, sin embargo, no hay ninguna interacción en estos partidos, al menos así, se ve, cada uno jala por donde puede, mientras Perla se va quedando en el desierto.
La mía es una crítica constructiva. Espero con vehemencia, que la situación se reconforte. Hago votos para que la oposición juegue su papel histórico por el bien de la democracia, la pluralidad- y la estabilidad de Oaxaca y del país.
