ARENA POLITICA

Mario CASTELLANOS ALCAZAR

SALOMON JARA DIVIDE AL CONGRESO

Nuevamente, la fracción parlamentaria de MORENA en la LXIV Legislatura del Estado, entra en disputa por la dirigencia de la Junta de Coordinación Política y asimismo por la elección de los candidatos a diputados locales, federales y presidentes municipales que se rigen por el sistema de partidos políticos.

Y como siempre, tiene metidas las manos el senador de MORENA, por Oaxaca, Salomón Jara Cruz y el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, Horacio Sosa Villavicencio, quienes están maquinando una nueva embestida en contra de sus mismos compañeros de
la bancada morenista integrada por 26 diputados obradoristas.

Salomón Jara en su intento de tener el control de la caterva morenista trata de imponer como presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado a la diputada Elizabeth Guzmán Díaz, su incondicional, para sus fines políticos como último recurso ante su representación en picada, luego de que está viendo perdida su esperanza de ser por segunda vez el candidato a la gubernatura de Oaxaca en la elección del año 2022.

No Las tiene todas consigo y siente que ha caído de la gracia del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien lo hizo candidato a la gubernatura de Oaxaca en el año 2016, por primera vez, pero dista mucho en la segunda oportunidad, incluso, porque el Ejecutivo Federal se ha dado cuenta que no tiene el apoyo y simpatía del electorado oaxaqueño.

Jara es el responsable de que en Oaxaca exista una división en la militancia de MORENA, pues a decir, se ha rodeado de tribus, organizaciones sociales y políticas fuera de tono partidista, que han utilizado a este partido como trampolín político en todos los niveles de dirección, desde los escasos comités municipales, el Comité Estatal de MORENA, la Cámara de Diputados y en las presidencias municipales.

Así, como respuesta a sus patrañas, ocho de los 26 diputados de MORENA del Congreso del Estado se han revelado contra el senador en su intento de imponer al dirigente de la fracción parlamentaria y de la Junta de Coordinación Política, que presuntamente sería la diputada Elizabeth Guzmán Díaz, quien forma parte del equipo incondicional del senador de referencia.

Los diputados disidentes al senador Jara son encabezados por los diputados morenistas, Othón Cuevas Córdova y Ángel Domínguez Escobar, integrantes de los ocho legisladores, quienes se declararon en guerra y en consecuencia pidieron la intervención del Presidente del Comité Nacional de MORENA, Mario Delgado Carrillo, recién electo en el cargo, luego de una disputa con su opositor, Porfirio Muñoz Ledo, quien también contendió por el mismo puesto partidista.

Es decir, este caso ya trascendió, los manifestantes se montaron las trancas, haciendo caso omiso a la representación del Comité Estatal de MORENA, que encabeza Sesúl Bolaños López, quien ni enterado esta de dicha inconformidad ante la división interna de esta dirigencia, que también está en disputa con el delegado de este partido, Ericel Gómez Nucamendi, caso que también llegó a los tribunales electorales.

Salomón Jara Cruz, ya anda volando bajo y muy desesperado al no contar con el respaldo total de los 26 diputados locales, que empiezan a deslindarse de su apoyo al senador, otros son insidiosos, ya que no es la primera vez que hace y deshace en la fracción parlamentaria, incluso, fue el que impuso en la dirigencia de la Junta de Coordinación Política a Horacio Sosa Villavicencio, hermano del otrora dirigente la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), Flavio Sosa Villavicencio,, quien encabezó en el año 2006 el levantamiento en contra del ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz, lo que dio lugar a un clima de violencia, en apoyo al magisterio oaxaqueño, ante las presuntas agresiones del entonces mandatario estatal.

Ahora los diputados de MORENA, no están respondiendo a los postulados del presidente Andrés Manuel López Obrador, en lo que se refiere al combate de la corrupción, la impunidad, ni siquiera forman parte de la austeridad republicana, más bien, se han puesto al servicio del gobierno estatal (PRI), así, no rinden cuentas del presupuesto del Congreso del Estado, que ejerce más de 600 millones de pesos anuales en completa opacidad.

carloscastellanos52@hotmail.com

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