BOICOTEO A LA ELECCIÓN JUDICIAL
Por: Carlos CASTELLANOS ALCÁZAR

Estratégicamente la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE)- anunció el paro nacional de los maestros disidentes a partir del 15 de mayo del presente año para exigir la solución de sus demandas–..
Principalmente la derogación de la Ley del ISSSTE del año 2007- que no les da derecho a sus prestaciones, pensiones justas, jubilaciones, servicios médicos eficientes y vivienda, entre otros, que limitan las prerrogativas de ley de los trabajadores.
No es casual, que el paro- que conlleva una serie de manifestaciones de protesta con bloqueos y plantones en ciudad de México- directamente en Palacio Nacional, es un plan con saña, estratégico y bien planeado, es pues- un ataque a la yugular de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien se cerró a la solución de las demandas del magisterio disidente, les dice que si, pero no hay resultados.
Le salió el tiro por la culata, la huelga estallará en los momentos más críticos, justo a quince días del uno de junio, fecha de las elecciones de los jueces, ministros y magistrados del Poder Judicial- que por primera vez se realizará en urnas, pese a que en el proceso electoral existe un clima de escepticismo, injurias y polémicas por la disputa de los puestos judiciales, la situación empeora porque los maestros paristas están previendo boicotear dicha elección para presionar al gobierno de la cuarta transformación.
Es el momento estratégico; a la insurgencia magisterial le cayó como el “anillo al dedo”- que no les hayan resuelto sus demandas rezagadas- desde el primer sexenio morenista que presidió el expresidente Andrés Manuel López Obrador, complejo- que se agrava con la actual presidenta de México, quien no le da importancia al movimiento de la CNTE- y por supuesto, que prefiere congraciarse políticamente con el SNTE, sindicato “charro”, que aplaude las acciones del gobierno.
Es paradójico- que mientras el aparato gubernamental está inclinado en la elección de los juzgadores, incluso- con dados cargados- destinando recursos del erario público para la promoción y publicidad del proceso electoral tan cuestionado por presuntas irregularidades y fraudes, los maestros ondean la bandera, declarando el paro nacional, relativamente porque la presencia de los disidentes no tiene tal cobertura- pero si en cuando menos una docena de Estados de la República.
Es un craso error que la Ejecutiva Federal este coqueteando con los representantes del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), que encabeza Alfonso Zepeda Salas en representación del sindicalismo oficial- a quienes recibió con beneplácito el 25 de marzo de los corrientes, estos entregaron un pliego petitorio con demandas de mejores servicios de salud, certeza laboral, basificación, aumento salarial y por no dejar concuerdan con la derogación de la reforma del ISSSTE del 2007.
Por supuesto, que es el juego sucio al que se presta el gobierno federal para contrarrestar las acciones de presión de la CNTE, que va con otros métodos de lucha, al paro nacional ya anunciado, o bien- se trata de dividir al magisterio nacional en una confrontación entre el gremio oficial (charros) y los disidentes- como ya se está dando, ambos se disputan la supremacía sindical,
Es el gobierno el que lleva las de perder; el momento es de la CNTE- que tiene medido al mando en el gobierno, pues- si los paristas boicotean la elección de los juzgadores, el uno de junio, sería un golpe y fracaso certero al régimen morenista- ante el probable fracaso del proceso electoral- sin embargo, no hubo premeditación de la Ejecutiva para evitar un desastre político, sino al contrario lo propagó- es decir- logró unir a la CNTE, pero en su contra, “vaya soberbia de los morenos”