NO ACABAN LOS HOMICIDIOS DOLOROSOS EN MÉXICO
Por: Raymundo IBÁÑEZ DEL CASTILLO
La situación en México en cuanto a seguridad, es preocupante y hasta alarmante, porque al inicio de la semana en curso, durante los primeros 20 días del gobierno autoritario y dictatorial de Claudia Sheibaum Pardo, se reportaron más de mil 300 homicidios dolosos.
Es decir, en las tres primeras semanas de la segunda parte del gobierno autoritario y dictatorial, que se inició el primero de octubre a la fecha, se han registrado un promedio de 65 homicidios dolosos por día, qué divididos entre las 32 entidades del país, incluyendo la Ciudad de México, tenemos un resultado de 2.03 en cada una de estas.
Dicho en otras palabras, en las últimas tres semanas, las primeras de la segunda parte del docenio con Claudia Sheibaum Pardo, tenemos en el país, un promedio de 2.7 asesinatos dolosos cada hora, que si para el Gobierno Federal no es significativo, ni representa nada, porque estos son del fuero común, pero derivados de la inseguridad, para los mexicanos, es altamente preocupante y hasta alarmante, porque la seguridad no mejora y por el contrario, empeora cada día más y mas.
Y a este paso, si a tan solo tres semanas del cambio de nombre, que no de gobierno, se han registrado tantos homicidios dolosos, que incuestionablemente rebasarán los 200 mil que se registraron en la primera mitad de este docenio, porque ya no es sexenio, ni que decir de lo que ocurrirá en los próximos meses y años.
No tiene por qué haber muertos, y menos un sin número de asesinatos dolosos, cuando que el Estado, está obligado a evitar más muertes, con eficiente y adecuada vigilancia de la policía preventiva, ya sea estatal o Federal; eficaz combate a la delincuencia, sin complicidades y sin protección policiaca a los delincuentes; cero portación y tráfico de armas de fuego y de otro tipo, que se utilizan para este tipo de crímenes y; tareas de inteligencia e investigación, para detectar los «modus operandi» de los criminales, para reducir la delincuencia y someterlos implacablemente.
Contrariamente, cuando el Estado no asume su responsabilidad, como ocurrió en la primera mitad del docenio y está ocurriendo en la segunda parte, los criminales, organizados o no, actúan libre e impunemente y las consecuencias están a la vista: desorbitado grado de inseguridad, homicidios dolosos en aumento, asaltos a mano armada en plena vía pública y en carreteras, robo con violencia a negociaciones y casas- habitación, etc. etc.
¿Y el Estado?, el gobierno federal o la cabeza de este ente gubernamental, como es Claudia Sheibaum Pardo, ¿Dónde está?. ¿Qué hace por los mexicanos?. No se puede lavar las manos, poner oídos sordos a la exigencia de acabar con la inseguridad y los homicidios dolosos que laceran a los mexicanos, y hasta fingir demencia, o hacerse cómplice de esta insoportable situación, por omisión o por complacencia con los criminales de tan repudiables actos.
Es más, si a Claudia Sheibaum Pardo, no le interesa en lo más mínimo la seguridad y la vida de todos y cada uno de los más de 131.1 millones de mexicanos, ni tampoco la muerte de más de mil 300 asesinados dolosamente, que valore los 4.9 billones de pesos, equivalentes a 245 mil millones de dólares, que supuestamente se invirtieron el año pasado en seguridad, según datos del Instituto para la Economía y la Paz (IEP).
El resultado para los mexicanos de tan cuantiosa inversión o despilfarro, es nulo, porque el territorio nacional, está invadido por la violencia y la inseguridad y las calles, caminos y carreteras, convertidas en ríos de sangre.
