Salud de mentiras o proyecto político.
Por: José Hernando Martínez-Bastida S.
3 mil 450 personas con diagnóstico positivo al virus SARS-CoV-2, en 6,795 pruebas realizadas, a personas con síntomas de Covid 19, en Oaxaca, que señaló el experto del gobierno mexicano, López Gatell, tuvo su mayor punto, punto Acme, el 22 mayo con 902 diagnósticos confirmados.
Y ese mismo día se habían realizado 2,461 pruebas a personas con síntomas, hoy a 25 días, las personas con la infección detectada, son 3 mil 450 infectados y 559 con la enfermedad activa, lo que dice es una muestra clara y constante de que la enfermedad va en descenso.
El periodo de incubación del virus es de 4 a 7 días, para desarrollar los síntomas, la duración promedio de la enfermedad es de 14 días, casi dos ciclos del supuesto punto más alto de contagios.
Tan mal va el gobierno de Oaxaca en el manejo de la pandemia, que bajo el agua viaja a recibir asesoría del expertise mexicano, Hugo López Gatell, quien los exhibió.
Recuerden que la Organización Mundial de la Salud lo invitó a formar parte del panel de expertos del Reglamento Sanitario Internacional por 4 años.
Pero para los oaxaqueños y principalmente a los familiares y amigos de las 400 personas que han muerto por el padecimiento viral, ya no hay remedio o los indemnizarán al demostrar que fue por negligencia..
Y la pregunta, la visita de Alejandro Ismael Murat, acompañado, del secretario de salud, Donato Casas y la encargada de la presidencia, Susana Harp, a que se debe, si ya paso lo peor,
La opacidad y la manifiesta falta de interés en mantener informada a la sociedad oaxaqueña, sello de la oficina de prensa, de los coordinadores con nombramiento, lo que refuerza la idea, de que la inoperancia de los mecanismos del estado para difundir, es con un propósito definido.
Pero para eso deben ser dirigidos por personas que no conocen el estado, ni a los habitantes, pero si los fines de quien manda en esté gobierno, por que sus acciones denotan que ni al propio gobernante conocen.
Además, en el día 17 de la “nueva normalidad”, decretada por el gobierno de México, Oaxaca sigue en «semáforo rojo”, es decir solamente actividades esenciales, cómo cobrar derechos vehiculares y lavar autobuses de pasajeros, organizar fiestas oficiales donde se contagian los funcionarios, etc.
Eso es el adecuado manejo de una crisis sanitaria, ojalá y el saber realmente, que la banalidad con la que la administración estatal tomo la pandemia, sea un factor para que ahora, si se haga lo adecuado, lo correcta ya no se puede.
Por ejemplo, la sabia decisión de la mayoría de los bautizados, por el gobierno de México, cómo “municipio de la esperanza”, 213 de los 570 que hay en el estado, se negaron a levantar las restricciones sanitarias de la llamada “sana distancia”, que Murat H. si quería.
Pero ante el vacío que le hicieron los presidentes municipales, trato de “bajar el balón”, con un “si ellos quieren», lo que para sus super asesores y contlapaches, fue el culmen de la apoteósica y meteórica carrera política, que inició en su tierra con el canal de televisión estatal.
Hoy, ir a ver a Gatell, exhibe a quien no tiene en quien apoyarse, la cita, evidentemente, fue concertada por Susana Harp, senadora, delegada Covid de la presidencia y sobrina del magnate Slim, que, si no, solamente se reúne con José Luis Alomía y de suerte.
Esperemos, no resuelva la atonía informativa, convocando a conferencia de prensa, sin preguntas, porque solamente hace que los periodistas arriesguen su salud.
Además, la primera pregunta será, ¿cuál es el plan del gobierno de Oaxaca, para evitar que los habitantes, tengan que salir a trabajar y conseguir comida, sin poner en riesgo su salud?, su nuevo coordinador de prensa, Vallejo Gil, dirá: “que elijan”, comida o muerte.
ANDAMOS …