ARENA POLÍTICA

MÉXICO Y EL ATAQUE A TRUMP

Por: Carlos CASTELLANOS ALCÁZAR

      El gobierno mexicano debe estar preocupado por el atentado que sufrió el expresidente y candidato presidencial-vía reelección, de Estados Unidos de América, el republicano, Donald Trump, pues, cualquier estallido, será de funestas consecuencias para México, en lo político, económico y social. 

      Por supuesto- que el atentado era para asesinarlo, sin embargo, se salvó de milagro, luego de haber sido disparado por un solo tirador con arma de fuego, que le causó una herida en la oreja derecha- que no paso a mayores, pero sí, causó conmoción, por tratarse de una potencia mundial.

      Un estallido social en el vecino país del norte causaría serios problemas en el ámbito social y político- sobre todo en EE. UU. y los países que tienen transacciones comerciales y de productividad, que mueven las economías y lo relacionado a la globalización de las políticas de gobierno. 

      Afortunadamente- no paso a mayores, de lo contrario- de haber sido consumado el crimen- los países dependientes- y no dependientes, estarían, en una encrucijada social con afectaciones a las políticas continentales y por supuesto, los sistemas financieros por la caída de los mercados bursátiles- y todo lo relacionado a los capitales de inversión, pero, no solamente eso, sino, también, se relajarían las libertades, la democracia y la solidaridad entre las naciones. 

      Por supuesto, que- México- sería el país, inmediatamente afectado por su cercanía y la relación comercial- así como en la interacción en asuntos políticos, sociales y económicos, que son comunes de estos países, que de por sí- obliga al gobierno mexicano a modificar sus políticas en su relación bilateral, en seguridad y en materia comercial, ante la brutal violencia, que en el sexenio- que esta por concluir, se ha disparado como en ninguna otra administración con un sado de 190 mil crímenes del 2018 al 2024. 

      Afortunadamente, no se consumó el crimen de Trump, luego de ser balaceado por Thomas Matthew Crooks- de 20 años de edad, quien le disparó con arma de fuego a una distancia de cincuenta metros- desde una azotea, en pleno mitin, en la comunidad de Butler Pensilvania- hiriéndolo- ligeramente en la oreja derecha.

      Fue un raspón- como- si hubiera sido un auto atentado con la finalidad de convertir a Donald en un mártir- y como consecuencia- elevar su popularidad- que lo llevaría al triunfo electoral en noviembre del presente año- algo, así, pues- fue ultimado, el autor material del atentado, por lo que no habrá más declaraciones para saber- quienes son los intelectuales.

      En el acto, los elementos de seguridad, asesinaron al tirador- Thomas Matthew- un civil y dos personas heridas, que acudieron al mitin, que congregó- a unos 15 mil adeptos en la plaza de Butler Pensilvania- en el momento- en que Donald-arengaba-su discurso de proselitismo político; fue cuando se escucharon los disparos. Los concurrentes se echaron a correr y otros se tiraron al suelo.

      El candidato se llevó las manos a la cara; ya tenía sangre en la oreja derecha; según, se salvó por un milagro, en cuestión de segundos, solo- porque- en ese momento movió la cabeza- atraído por una pancarta- auxiliado por el servicio secreto, pero, ya- el terror y pánico- corría como reguero de pólvora en los confines del mundo por tratarse de un país potencial.             

      Pese- a todo, es probable- que Trump gane la elección- que lo llevará a la presidencia de su país, desde luego- en un clima de suma polarización, violencia, odio y venganza, que lo hará- ejercer- el poder con mano dura en contra de sus opositores y por supuesto- endurecerá su política con México.

      Donald- siempre- ha despotricado contra los mexicanos a los que califica de flojos, asesinos, viciosos, delincuentes y todos los despectivos, que el presidente de los mexicanos en turno acepta- y se pone a la venia del gobierno estadounidense.

      Estados Unidos de América pasa por una revuelta entre los republicanos y demócratas, así, como, de los candidatos, Donald Trump y Joe Biden, respectivamente, prendidos en una lucha si cuartel por la disputa del poder en condiciones divergentes y una ventaja electoral para Donald,

      Los contendientes ya traen querellas muy arraigadas, que van- por el todo o el nada, muy golpeteados políticamente, pues, en el caso de Trump, con antecedentes penales por motivos de violencia, luego de que, el seis de enero del 2021, al termino de su mandato presidencial, incitó a sus correligionarios para que tomaran el Capitolio, pues, no aceptaba el triunfo de Joe Biden, pero, además, está señalado por delitos de corrupción y fiscales.

      Trump ha enfrentado a la justicia por los delitos imputados; algunos casos los ha ganado en legítima defensa, pero- en otros está bajo proceso judicial y con la condena de sus malquerientes, por decir, de los demócratas y la ciudadanía, pues, lo ven como un peligro de volver a la presidencia de su país.

      Mientras Biden, esta en la etapa más critica de su salud física y mental, muy débil, moralmente, pues, ya no coordina lo que dice y hace, dice una cosa y hace otra, por lo que sus seguidores le piden que se baje de la contienda, pero, no, pues- está aferrado a continuar en el proceso electoral, pese- a que se augura- su derrota, salvo que recomponga sus estrategias políticas.    carloscastellanos52@hotmail.com

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