VASQUEZ VILLANUEVA A CORTV
Mario CASTELLANOS ALCAZAR
No fue casual, ya se mencionaba al político oaxaqueño, Martín Vásquez Villanueva para ocupar un cargo administrativo en el gabinete del gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa (PRI), solo que no se le ubicaba el lugar preciso, pero por al fin, ya quedó como director general de la Corporación de Radio y Televisión, (CORTV) del Gobierno del Estado.
Un cargo muy cuestionado, por cierto, dada la función que desempeña esta corporación, que no ha sido la adecuada para informar a los oaxaqueños, respecto a las actividades culturales, políticas, económicas y sociales, pero también, porque este puesto ha sido ocupado por personas que no tienen el perfil en materia de comunicación social o bien son nombramientos para pagar las facturas políticas.
En este caso el médico cirujano con maestría en Gobernanza y Comunicación Política, Martín Vásquez Villanueva, es más político que comunicador social y como dice el refrán: “zapatero a tus zapatos”, pero, en donde gobierna capitán no gobierna marinero; el gobernador Alejando Murat Hinojosa, lo nombró en el cargo de referencia- y nada más, haber quien chista, ni de chiste, porque es el que quita y pone.
Martín Vásquez Villanueva es un político de rango institucional, originario de Santo Domingo Tehuantepec (TEHUANO), priista a ultranza, de la vieja guardia neoliberal, de los que saben el teje y maneje de las entrañas del viejo sistema político, además de ser netamente ortodoxo, lo mismo es muratista que ulicista, pues se acopla a todos los gobiernos priistas, lo que le permite escalar puestos políticos o administrativos.
Era el prospecto para la Coordinación de Comunicación Social y Vocería del Gobierno del Estado, que es diferente a lo de CORTV, “en el supuesto, que más vale malo por conocido que bueno por conocer”, pero no fue así, porque se cruzaron otros intereses de peso mayor o bien, por una recomendación del gabinete federal, por lo que en este cargo de vital importancia fue nombrado Francisco Vallejo Gil, que solamente dios sabe de dónde viene y cuál es su procedencia, lo cierto es que después de diez días de su nombramiento no ha dado la cara.
Martín se acopla en lo político y domina el mimetismo, lo mismo que baila la sandunga, baila los sones de las tradicionales velas tehuanas, que los jarabes, chilenas y fandangos de los valles centrales, la mixteca y la costa oaxaqueña, es decir, se compagina a la música oaxaqueña, al igual, que come garnachas, come los siete moles, pero, en fin, ha hecho carrera política, esto por su institucionalidad, disciplina, obediencia, ¿servilismo?, quien sabe.
Quien es, cuáles son sus méritos y cartas de presentación?.- todos están enterados que fue en sus tiempos mozos, presidente municipal de su natal, Tehuantepec, pero luego, la ruleta lo favoreció, ya fue diputado local y federal, sí, también, ex Secretario de Salud en el Estado en la administración del ex gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, en donde empezó su calvario por un presunto fraude de 700 millones de pesos, que según, la averiguación previa 69 / V.G / 2011, destinó a la campaña electoral de Eviel Pérez Magaña, quien en el año 2010 fue candidato a la gubernatura de Oaxaca, quien perdió de calle la elección ante Gabino Cué Monteagudo.
Hubo un tiempo que a Martín de llovió en su milpita, su pecado fue ser uno de los Secretarios de Salud, el más consentido del ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz, por ello logró todo, poder económico y político, pero también involucrado en las obras de hospitales que se quedaron inconclusas.
Desde entonces, el Diario Reforma ya denunciaba la corrupción en la Secretaría de Salud de Oaxaca. El derroche de 25 millones de pesos que Ruiz Ortiz repartió a sus funcionarios incondicionales al término de su administración gubernamental, de estos le tocó a Martín, 300 mil pesos constantes y sonantes en el mes de noviembre del año 2010.
Vásquez Villanueva, quien finalmente fue exonerado de las imputaciones en su contra gozó de la simpatía presidente de México, Enrique Peña Nieto (PRI). Quien le dio el nombramiento de Delegado de la entonces Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) en Oaxaca, institución involucrada en la estafa maestra de la entonces Secretaria de esta institución, Rosario Robles Berlanga., ahora presa por presunto fraude de miles de millones de pesos.
Pero bien, después de todo, luego de una travesía política que lo dotó de vasta experiencia para bien o para mal, figura en el ánimo del gobierno estatal. Fue aspirante a la gubernatura de Oaxaca, pero declinó en favor del ahora gobernador, Alejandro Murat Hinojosa, claro, que ahora, el gobernante le está pagando la factura con un cargo de consolación.
Pervive en el argot político, como pocos, en las filas del PRI agonizante, hoy resurge nuevamente en la administración del gobernador Murat Hinojosa como una de sus mejores cartas del Ejecutivo, quien le depositó toda su confianza y apoyo para afinar los trabajos de la Corporación de Radio y Televisión, que muchos dicen, “ni se oye ni se ve”, pero esa es la tarea de su nuevo director general.
La responsabilidad de Martín es encomiable y de vocación de servicio para hacer de dicha corporación una institución renovada, con nuevos diseños y esquemas que garanticen la libertad de expresión, que debe ser plural, participativa y democrática para todos los oaxaqueños, asimismo, ampliar su cobertura para que tenga mayores alcances, en fin, se requiere de un nuevo modelo en materia de comunicación social desde el punto de vista cultural, económico, político y social, al menos eso es lo que se desea.
De las demás historietas voluntarias e involuntarias de los funcionarios públicos, a veces denunciados con pruebas o sin pruebas, esto, porque también pueden ser acusaciones sin fundamento o injurias políticas, viene borrón y cuenta nueva. Martín va por una nueva responsabilidad y tiene que demostrar que si puede. Es de los que dice, “critícame hermano, critícame, vale más una crítica que una lisonja”. Y es que así es cuando el funcionario o gobernante no es criticado, ya está en picada.
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