2 DE JUNIO, EXAMEN DE INTELIGENCIA
Por: Francisco Alejandro LEYVA AGUILAR

¿Ya decidiste la intención de tu voto?, ¿ya tienes lista tu credencial para votar pasado mañana?, yo debo confesarte que nunca he tenido duda porque no voté por Andrés, sino por José Antonio Meade ¿te imaginas a un México gobernado por un hombre preparado como José Antonio?, dice Joaquín Sabina que “no hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió” y acepto que son un nostálgico de lo peor.
Por eso mi voto de este domingo, lo decidí desde febrero de 2019 y fue así porque le di al peje, dos meses de beneficio de la duda, no pude darle más porque de inmediato sacó a relucir su talante rencoroso e hipócrita que se fue acentuando y profundizado conforme pasó el tiempo. Lo único que recuerdo en mis columnas que le aplaudí, es que haya dicho en su discurso de toma de protesta que iba a beneficiar al Sur, aquí donde está nuestro estado Oaxaca.
Pensé que tenía razón porque con el Sur, el país tiene una deuda histórica, pero nunca pensé que el peje lo fuera a usar como privilegio para que sus hijos y los amigos de sus hijos hicieran negocios multimillonarios con las medicinas y la construcción de sus obras insignia. Nunca pensé que fuese a deforestar un pulmón de México y menos que afectara cenotes ancestrales.
Por eso solo me duró dos meses el beneficio de la duda y no me equivoqué, lo dije en marzo de 2019 “López será el peor presidente que haya tenido México en su historia” y es la verdad, porque ese año 2019, sin pandemia y sin inflación, el peje no pudo hacer crecer a México al 6% como lo prometió en campaña y al contrario, el Producto Interno Bruto (PIB) del país, se colocó unas décimas por debajo del cero, lo que no había pasado desde la decena trágica después de la revolución mexicana.
Con pandemia las cosas fueron de mal en peor, porque México no solo no creció, si no perdió vidas humanas que, si el manejo de la pandemia hubiese sido eficiente, no se hubieran perdido. Hay un informe que nos asegura que al menos 300 mil mexicanos que perdieron la vida en la pandemia, deberían estar vivos y entre ellos, algunos amigos míos y seguramente algún conocido de usted que me lee.
México no está para un sexto informe de gobierno, sino para un recuento de daños porque el país que tuvimos hace seis años, ya no lo tenemos ahora. El peje y sus otros datos presumen cosas como el aumento al salario mínimo, pero subirlo a lo estúpido o como mero acto propagandístico, causa inflación; presumen un super peso cuya tasa de cambio frente al dólar se coloca en los 16 pesos mientras que en 2018 costaba 20, el problema es que con un dólar de Peña Nieto te comprabas dos kilos de tortillas que costaba 8 pesos y con el dólar del peje, te compras medio kilo porque hoy la tortilla cuesta 25 pesos el kilo.
Si tú que me lees haces un ejercicio sencillo de matemáticas, te vas a dar cuenta de la desgracia que es este país en materia económica. ¿Te alcanza para comprar lo mismo 100 pesos en 2018 que en 2024? Simplemente las tortillas, hoy con 100 pesos te compras cuatro kilos de tortilla, en 2018 con esos 100 pesos ¡hacías una taquilla!, mínimo te podías comprar 12 kilos.
Por eso ya decidí mi voto y por eso he sido muy constate en criticar los yerros del peje y puntualizar sus mentiras como eso de bajar la gasolina a 10 pesos el litro desde el primer minuto de su gobierno y luego documentar su desvergüenza al decir que “él no dijo que iba a bajar la gasolina a ese precio”.
De ninguna manera votaría por la continuidad de un gobierno fallido como el de López, no hay manera que le de la confianza de mi voto a alguien que ni piensa, ni razona sino solo obedece, no le voy a dar mi voto a una marioneta cuyos hilos de conciencia estén manejados desde la chingada.
Le negaré mi voto a la continuidad que es hermana de la calamidad, yo no quiero un México de cuarta, sino de primera, yo no quiero un México con miedo sino con LIBERTAD, yo no quiero un México de productividad criminal, sino uno de emprendimiento ciudadano.
No quiero un México donde alguien sea capaz de portar un arma y matar a mansalva a un candidato que se acaba de bajar de un templete o a un niño que camina por una calle o a una mujer a quien secuestran, venden, violan y matan o a una niña inocente que cometió el único pecado de nacer mujer.
No quiero un México donde quienes busquen a los desaparecidos sean sus propias madres a quien la mafia aniquila cuando se vuelven incómodas; no quiero un México donde nos falten 44 o 144 mil, no quiero un México con 6 mil fosas clandestinas, rompecabezas de huesos que ni siquiera pueden ser identificados, en fin no quiero este México que nos está dejando el peje y que quiere que siga igual con su corcholata.
Por eso ya decidí mi voto que será por Xóchitl Gálvez, ella será la próxima presidente de México, ella sí me representa y te pido que si no has decidido tu voto, lo razones bien, no escojas a la más popular sino a la más preparada. Si te equivocaste en 2018 como Brozo, rectifica y no vuelvas a cometer la misma pendejada.