DE MEZCAL Y OTROS BEMOLES

Por: Dra. Blanca Esther Salvador Martínez

RUTA DEL MEZCAL ANCESTRAL Y ARTESANAL

San Dionisio Ocotlán, Ocotlán, Santa Catarina Minas y San Baltazar Chichicapam

MAESTRO MEZCALERA ANGÉLICA GARCÍA VÁSQUEZ

Se ha hablado en esta columna en ocasiones anteriores que en Oaxaca la mujer ha desempeñado un gran papel en lo que se refiere a la industria del mezcal.

Esto no es nuevo, y tampoco es el resultado de la implementación de políticas de género en estas comunidades, que hasta la fecha no han llegado como en las ciudades, o entornos electorales y políticos, en donde se escucha con frecuencia este discurso.

La participación de la mujer en las comunidades productoras de mezcal, ha sido el resultado de la tradición, las costumbres y de las necesidades.

El caso de Doña Juana de San Baltazar Chichicapam, es un claro ejemplo, ella ayudó siempre a su esposo Faustino.

Doña Juana estuvo siempre a su lado cuando él fabricaba el mezcal, tanto en sus jornadas diurnas preparando los alimentos, como en las noches de desvelo cuando él destilaba, pasando ella el café.

Hay otros casos como el de Angélica, que aprendió el oficio al lado de su esposo al que siempre acompañó en su labor como maestro mezcalero, pero que al abandonar él esta dimensión, por causa de una enfermedad, ella tomó este oficio como medio de subsistencia de su familia.

La maestra Angélica no sólo logró subsistir con este oficio, sino que dio estudios a sus hijos que ahora ya son adultos.

Este oficio actualmente lo ha tomado incluso su yerno, quien le ayuda en la producción de mezcal.

La maestra Angélica cuenta con una marca registrada y también con una producción certificada, por lo que tiene posibilidad incluso de envasar para otras marcas.

El trabajo que ha realizado la maestra Angélica es loable no sólo por haber llevado adelante a sus hijos como jefa de familia, sino porque también lleva muy en alto el lugar de la mujer en la industria mezcalera.

Esta de moda ser mezcalera, hay quienes se dicen mezcaleras porque sin producir mezcal, acuden a muchos foros y cuentan con mercadotecnia y reflectores en las redes sociales, pero la realidad es que la maestra Angélica sabe a ciencia cierta lo que significa ser mezcalera.

Angélica es una mujer que se transporta a pie, que usa hermosos mandiles con flores – vestuario típico de la comunidad- es una mujer de fuerza y carácter, el cual lo ha forjado a lo largo de su vida como madre y jefa de familia, y también como mezcalera, no tiene reflectores ni redes sociales, tampoco hace tick tock; lo que ella hace es un mezcal exquisito de magueyes de su región.

Al igual que todos en su comunidad, ella respeta el mezcal, la bebida y la forma de tomarlo, conoce los magueyes y los caminos de Chichicapam que la llevan a estos magueyes.

Es una mujer de trabajo, de tradición y sobre todo de amor a su oficio y a la naturaleza que le brinda la materia prima para producir su mezcal. Estimado lector cuando visite Chichicapam, no deje de visitar a la maestra Angélica en su palenque “El Torito”.

Entradas relacionadas