VILLANUEVA MUERDE A CASIQUE
Por:Carlos CASTELLANOS ALCÁZAR
El presidente del PRI, en Oaxaca, Javier Casique Zárate, un partido sin militancia, corrupción y desbandada- habla sobre la Reforma Judicial a la que califica de incongruente por el hecho de que los jueces, ministros y magistrados se elegirán a través de tómbolas.
Tal vez lo hace para distraer a la militancia y a la sociedad de los problemas internos de los directivos del PRI en esta entidad en donde existe una lucha sin cuartel por la disputa de las carteras del comité estatal, que si bien, el partido, es un esqueleto, pero se pelean los huesos calcinados de corrupción.
Martín Vásquez Villanueva es quien encabeza la facción, pues, luego de haber sido el candidato perdedor del PRI, a la presidencia municipal de la capital- favorecido por Casique, ahora le muerde la mano y trata de destituirlo a la mala de la dirigencia estatal, pues es su aspiración, aprovechando la coyuntura, por lo que está moviendo los hilos para lograr su objetivo o bien, para romper de tajo la escasa sensibilidad política del partido en el ocaso.
¿Podrá Villanueva equilibrar la balanza del partido- así como la unidad y fraternidad de la militancia? Se ve imposible por la falta de carisma, convicción y sobre todo porque es un émulo y enviado de la dinastía de los MURAT y de lo que se trata es la representación de la militancia para jugar en las transacciones y obtener migajas del poder político en Oaxaca.
Mientras Casique hace gala de que el PRI es el único partido que no se ha doblado y se mantiene firme en su convicción ideológica en contra de las reformas constitucionales que atentan contra la democracia y las libertades, por tanto, los pocos priistas que quedan, luego de las renuncias masivas de la militancia sobre todo en Oaxaca para militar en MORENA simplemente están a la expectativa.
En un intento de desviar la atención de la mini militancia priista ante los graves problemas de corrupción de este partido, en vía de su desaparición, luego de la extinción del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Casique hace alarde que su partido es el único que no dio su voto en favor de las reformas e iniciativas de ley y por supuesto- el PRI está en contra de todo retroceso histórico.
Se contradice una y mil veces, pues como dirigente estatal del tricolor no tiene control alguno, convicción ni fundamentos. Los cuatro diputados del PRI del Legislativo del Estado lo mandaron al diablo y por consiguiente se sumaron a la fracción parlamentaria de MORENA sus aliados del PT y PVEM en favor de la Reforma Judicial y la militarización de la Guardia Nacional.
Los diputados locales: Jorge Villacaña Jiménez, Lizbeth Concha Ojeda, Fredy Gil Pineda y Luis Eduardo Zavaleta son los traidores que le dieron la espalda al PRI, que les dio el poder, pues dieron su voto en favor del Plan C- que dejó el expresidente Obrador, rumbo a la dictadura de la Cuarta Transformación que acaba con la República y la federación.
El priismo en Oaxaca esta desactivado sin opción alguna- como a nivel nacional, así como lo reflejó en las elecciones intermedias en esta entidad en donde no tiene triunfos, pero sí, derrotas contundentes, que lo llevan al vacío, ahora bien, en los gobiernos priistas, el tricolor llegó a tener la mayoría de las gubernaturas de las que solo le quedan dos para llorar.
Sin embargo Casique, ve a un PRI fuerte y con expectativas en Oaxaca en donde la militancia esta hostigada ante la somnolencia del partido, la corrupción, los fraudes y los mismos vicios de siempre, él se adjudicó la diputación local plurinominal a espalas y violación de los derechos de la militancia, que le guarda repudio- hasta pedir su renuncia.
Cierto que el partido en Oaxaca anda de mal en peor, pues no hay iniciativa, proyectos y programas para levantarlo de su peor crisis política, que deriva en lo social, cuestión, que se agudizó con la renuncia de una ola de priistas traidores que se fueron a MORENA y otros que están a la deriva
